Es un increíble sitio arqueológico considerado como el más importante de las antiguas poblaciones de la región. Se trata de una fortaleza construida por los tilcaras en un punto estratégico sobre la Quebrada de Humahuaca sobre un morro a 80m de altura sobre el Río Grande. Fue un lugar ideal para defenderse de los ataques; dominaba el cruce de los dos únicos caminos del lugar defendiendo los acantilados sobre el Río Grande y las ásperas laderas. En los faldeos más accesibles construyeron altas murallas.
Fue descubierto por el etnógrafo Juan Bautista Ambrosetti en una de sus investigaciones arqueológicas en la zona del noroeste argentino en 1908.
En la actualidad se consideran adecuados el planteamiento del recorrido interno y las reconstrucciones de los techos. Por el contrario la reconstrucción de los muros y el acceso vehicular provocaron modificaciones notorias. En el sitio se encuentra además una pirámide trunca que no guarda relación con la tradición arquitectónica de la región.
Con el análisis actual de fotografías, planos, croquis y publicaciones que hayan sido realizadas antes de 1910 en el Pucará, se intenta identificar parte de las transformaciones realizadas al realizar la reconstrucción permitiendo controlar el impacto del recorrido turístico, factores climáticos y la preservación mas adecuada del lugar.
A sus pies se despliega un agradable Jardín Botánico en el cual pueden descubrirse especies autóctonas de la Quebrada y de la Puna.